11 diciembre 2008

Los perros tienen envidia

Científicos de la Universidad de Viena (Austria) han demostrado que los perros son capaces de percibir cuando son tratados injustamente, lo que les lleva a dejar de obedecer las órdenes de sus amos o, incluso, desarrollar cierta tendencia hacia la envidia.

El estudio, que aparece publicado en el 'Proceedings' de la Academia Nacional de las Ciencias de Estados Unidos, muestra la reacción de dos cánidos entrenados ante recompensas como un trozo de pan, una salchicha o simplemente nada, tras haber ofrecido sus patas a los investigadores.

En una de las pruebas al primer perro obtuvo el trozo de pan, mientras que el segundo no recibió nada. Al repetir el test varias veces, el perro desafortunado rápidamente empezó a mostrar signos de envidia, como escarbar compulsivamente en el suelo o bostezar, además de negarse a dar la pata.

Sin embargo, por separado la situación es distinta, ya que los animales seguían dando la pata incluso si no recibían nada a cambio, algo que, en opinión de los científicos, es un indicio de que "se angustian" sólo cuando son tratados de forma injusta.

"Esto nos muestra que los perros son sensibles a recompensas diferentes. ¿Es envidia, o es sentido de la justicia?", se pregunta la jefa de la investigación Friederike Range. "Es difícil de decir, porque mucho depende de cómo definamos estas palabras".

En cualquier caso, los expertos concluyen que estos resultados demuestran que hay otras especies, además de los primates, con "aversión a la inequidad", aunque en un nivel "mucho más primitivo".

Asimismo, los investigadores creen que este sentido de la justicia pudo haber jugado un papel importante en la evolución del comportamiento cooperativo de los denominados animales sociales dentro sus comunidades. Por ello, el mismo equipo planea ahora realizar las mismas pruebas con lobos.