Cuando un perro adulto tiene problemas con la hormona del crecimiento… Bueno, lo cierto es que, según muchos veterinarios, no tiene arreglo, es decir, no hay una medicación efectiva que arregle el problema y que ayude al perro a paliar los efectos de esto.
La hormona del crecimiento hace lo siguiente:
* Hace crecer un exceso de piel, como si creciera pero no pudiera crecer de huesos.
* Separa los huesos lo que, a la larga, puede llegar a romperlos.
* Deforma la mandíbula, abriéndola y doblando los dientes.
* Agranda, y mucho, las patas y la cabeza (sobre todo el cuello).
* Las patas se convierten en muñones, donde apenas se le ven las uñas o dedos.