Para el proceso reproductivo de los perros existen una serie de pasos que son necesarios para llegar al éxito. Entre ellos están la detección del celo en la hembra, elección del macho, valoración de la salud fetal y todos los cuidados neonatales.
Finalizada la primera etapa que es la relacionada con establecer la ovulación de la hembra, y el coito o inseminación artificial, se pasa a la segunda fase donde son valorados los resultados de estas acciones, o sea se diagnostica la preñez y se procede al cuidado de la salud fetal.
La realización de ecografías es una de las herramientas más importantes para poder hacer una evolución de la salud de los fetos, posibilitando el hacer un diagnóstico inmediato por medio de un método no invasivo.
Son necesarias 3 ecografías durante la preñez de la hembra, la primera se hace en día cuarenta posterior del coito, la segunda se realiza alrededor del día cincuenta y dos para valorar el desarrollo de los fetos, y aquí se comienza a realizar un trabajo de prevención ante posibles problemas.
Ya la tercera se hace del día cincuenta y ocho en adelante, para confirmar alguna patología detectada en la anterior, se pueden evaluar el tipo de correcciones y el método que se utilizará para realizarlas.
Existen en la actualidad diferente maneras de prevenir patologías partiendo del diagnóstico de salud fetal hecho a través de las ecografías. Son patologías comunes e importantes las relacionadas con retrasos en el crecimiento y el sufrimiento fetal agudo.
Puede determinarse a partir de los estudios realizados a los fetos, si se hará un parto por cesárea, en estos casos los cuidados y controles serán rigurosos teniendo en cuenta que los cachorros no tendrán la misma capacidad de adaptarse a la vida extrauterina como aquellos que nace de manera natural.
Un cachorro que se encuentra con cuidados neonatales intensivos recibe una atención especializada durante las 24 horas, con medidas que tienen por objeto lograr un mejor intercambio de gases por medio de oxigenoterapia, una estabilidad térmica y el cuidado exhaustivo para prevenir infecciones.
Además, se lo alimentará hasta que posea un peso que haga posible restituirlo a su madre, comenzando así la tercera fase de la tarea de reproducción que es el cuidado de los cachorros recién nacidos o etapa neonatal que se prolongará hasta los 15 días de vida.
Luego, de los 15 y hasta los 45 días se está en la etapa de pediatría temprana, donde se hacen cuidados sanitarios y alimenticios y también se desparasitan.
La etapa de pediatría intermedia se dará desde los 45 días y hasta los 4 meses y por último viene la etapa pediátrica tardía donde a los cachorros se les trata como adultos en cuanto a su fisiología y a los problemas relacionados con el desarrollo hormonal y el crecimiento.