La leche en la etapa de cachorros es imprescindible. Los expertos aseguran que no hay mejor alimento que esto, pero en algún momento, la madre de nuestros cachorros considerará correcto dejar de alimentar de sus pechos a los pequeños. ¿Qué debemos hacer en estos casos? A continuación una serie de características que nos ayudarán a saber cuál es la mejor opción para alimentar a nuestros perros en su etapa de crecimiento.
Hasta los 4 o 5 meses de edad, podemos quedarnos tranquilos de que nuestra perra será una fuente natural de leche materna para sus cachorros. El problema lo empezamos a enfrentar cuando ella no sigue alimentando a sus perros y debemos comenzar a hacerlo nosotros.
En lugar de la leche materna, hay suplementos que pueden ser utilizados para alimentarlos, ya que contienen similares características a la de la fuente natural de alimento que le ofrece mamá can.
La leche vacuna por ejemplo, es muy fuerte para los cachorros y puede provocarle parásitos. En caso de no hacerlo, siempre termina causando malestar estomacal y puede producirle hasta vómitos a los pequeños cachorritos. El problema de los perros es que no toleran la lactosa, pero podemos darles de tomar leche sin lactosa, aunque a muchos no termina de cerrarles la idea de alimentar así a sus pequeños perros.
Tener un cachorro huérfano nos puede dar más de un dolor de cabeza al momento de alimentarlo, pero tenemos que ser comprensivos y entender la sensibilidad alimentaria de los canes. La leche que se vende para alimentar a los cachorros es muy buena, pero se habla de que puede causarle hasta cataratas y, sabiendo qué tan importante es esta etapa en la vida de un perro, dudo que teniendo noción del daño que se le puede causar alguien se atreva a alimentarlo sin antes consultar con un profesional.