Halloween es un mal momento del año para los gatos negros por su tradicional conexión con las brujas, hechizos y espíritus malignos.
En Gran Bretaña, los reportes de malos tratos deliberados contra gatos negros aumentan especialmente en las semanas cercanas a Halloween, dijo el miércoles la asociación protectora de animales RSPCA.
Pero parece que la gente no sólo trata mal a los gatos negros en octubre sino que también los rechaza el resto del año. Los gatos negros en refugios de animales tardan más tiempo que otros en encontrar hogares que los adopten, probablemente por toda la superstición que gira a su alrededor, dijo la asociación.
"Desafortunadamente, los gatos negros suelen pasar más tiempo que otros en nuestros centros porque generalmente son pasados por alto por los potenciales dueños", dijo la administradora del refugio, Beverly Leavy.
"Pero su color de pelo no los hace diferentes en cuanto al amor que tienen para dar", añadió. "Los gatos están listos para convertirse en mascotas maravillosas", agregó.
El problema de su imagen varía de país a país y a menudo involucra a gatos negros que se cruzan en el camino de las personas.
Los historiadores difieren sobre el origen de las supersticiones. Algunos apuntan a los antiguos celtas, otros a cuentos folclóricos que comparan a los gatos con las serpientes y los señalan como los constantes compañeros de las brujas. Finalmente, otros explican el origen en la creencia medieval de que provocaron la plaga negra en Europa.
La idea de que traen mala suerte también se ha introducido en el arte y la cultura popular.
El escritor estadounidense Edgar Alan Poe publicó un cuento corto llamado "The Black Cat" en 1843 y a fines del siglo XIX, un sombrío cabaret llamado Le Chat Noir abrió sus puertas en el bohemio barrio parisino de Montmartre.