20 mayo 2011

Características del gato siamés

Proveniente de Siam (Tailanda), el gato siamés fue llevado por primera vez a Europa en 1880, cuando se llevaron a Inglaterra; y sólo 10 años después desembarcaban en el continente americano. Se decía que era un “gato real”, ya que sólo podías conseguir uno si el rey de Siam te premiaba y, de hecho, el primero que se vio en Inglaterra fue un regalo al emperador británico.

Aspecto del gato siamés

El gato siamés pesa entre 2,5 y 5 kilos, dependiendo si es macho o hembra. Su aspecto es muy llamativo, oriental, ya que se trata de un gato estilizado y de largas extremidades, con la cabeza en forma triangular y el pelaje corto y suave: más oscuro en cara, cola y cabeza, beige en el resto del cuerpo.

Este pelaje tiene la ventaja de que no necesita demasiados cuidados ni un cepillado contante. Lo más llamativo del gato siamés son sus ojos, que suelen ser azules, a veces muy intenso. El gato siamés tiene tendencia al estrabismo, como parte de su herencia genética.

Comportamiento de lgato siamés

Como la mayoría de los felinos, su personalidad es independiente, pero su característica más destacada es la curiosidad: podemos encontrarlos investigando cualquier rincón de la casa. Además, el gato siamés adora estar con sus dueños, y casi nunca abandona el hogar, entre otras cosas, porque suele dormir 16 horas diarias.

No obstante, el maullido en época de celo suele ser irritante para muchos dueños: quizás sea de las pocas desventajas de esta raza, que tienen un carácter limpio y afectuoso.