
Tiene un carácter sociable, juguetón y afectuoso, suele ser muy paciente y tolerante por lo que puede considerarse una raza ideal para convivir con niños. Se adapta fácilmente a cualquier entorno aunque prefiere vivir en espacio interiores, puede convivir con otros gatos sin problemas aunque siempre marcará una jerarquía. Le encantan los saltos y las acrobacias por lo que podemos encontrarle situado en cualquier lugar.
Aunque su pelo aterciopelado no necesite una atención muy exhaustiva debemos pasarle a diario un guante de franela para eliminar el pelo muerto y mantener su pelaje con su brillo y tanto agradable. También es recomendable bañarle (de forma esporádica) y lavar su pelo con un champú específico que elimine el exceso de grasa.