22 noviembre 2011

Cómo elegir el veterinario

Al igual que cuando seleccionamos quien será el pediatra o médico de nosotros y nuestros hijos, la búsqueda del veterinario para nuestra mascota debe hacerse analizando todos los pros y contras.

Siendo siempre ideal que tanto el veterinario como sus auxiliares sean amables y nos inspiren mucha confianza y empatía con nosotros y nuestra mascota. A continuación te orientaremos sobre cómo elegir el veterinario ideal para que estemos tranquilos.

¿En qué momento debemos elegir el veterinario?

En realidad el veterinario ideal para nuestra familia debemos elegirlo desde el momento en que deseamos adoptar una mascota pues es la persona que nos podrá orientar sobre la raza, tamaño, etc de la mascota ideal para nuestro hogar (a veces sucede que nos emocionamos con tener un perro de raza grande pero el espacio es pequeño y nuestra mascota termina estresada, con problemas, tensiones, etc, por lo que es ideal consultar con el especialista).

Si no contactamos con el veterinario antes de la adopción, cuando llevamos a nuestra mascota debemos hacerle conocer la procedencia de la misma, además, brindarle información sobre si la madre recibió los cuidados necesarios, vacunas, y otros, que generaran que nuestro pequeño engreído tenga un buen sistema inmunológico.

Requisitos indispensables

Verificar que el veterinario elegido cuente con título y esté colegiado, además, ahora con las facilidades del internet, podemos ingresar su nombre a los buscadores para verificar si alguna vez ha existido una queja o denuncia sobre el ejercicio de su profesión.

Lo primero es la ubicación. Como prevención a cualquier problema de salud que podamos tener con nuestra mascota, es ideal que la clínica o consulta privada que seleccionemos quede cerca de la casa.

Visitar la consulta o clínica y solicitar una visita guiada a fin de verificar que las instalaciones son adecuadas y cumplen con los requisitos necesarios.

La primera consulta

Lo recomendado es no esperar a que nuestra mascota presente algún tipo de síntoma. Debemos realizarles chequeos de rutina como medida preventiva. Además, en la primera consulta seremos informados sobre la alimentación recomendada, fechas de vacunación, de desparasitación, entre otros.

Después, tendremos que estar atentos de sus tendencias de comer, jugar, dormir, defecar, entre otros, para avisarle al veterinario sobre cualquier cambio de su comportamiento. Finalmente, siempre es recomendable el ver en casa los lugares habituales donde descansa la mascota a fin de poder detectar cualquier anomalía, por ejemplo, residuos de un juguete, de alimentos que no ha debido comer, entre otros.