Desde el momento en que adoptas un animal en casa para cuidarlo y tenerlo como mascota, tu primer pensamiento podría ser, “todo lo que va a ensuciar tengo que limpiar”, y en definitiva es así, como responsable de tu mascota tienes que asear los espacios que ella ensucie, para que no tengas problemas de malos olores en los ambientes de tu casa. Es por ello que desde el momento en que el cachorro llega a casa, es aun todo un bebé y es ahí en ese tiempo donde debes estar dispuesto y con firmeza a enseñarle todo tipo de conducta que creas necesaria para que tu mascota muy aparte de ser linda, aprenda a ser aseada y admirada por todos.El que tu mascota se acostumbre a orinar y hacer sus deposiciones fuera de casa sería espectacular verdad, claro que sí y tú puedes ayudarla a conseguirlo. Al parecer esto es muy difícil, pensarás que el interactuar cualquier norma de conducta no dará resultado porque tan solo es un animal, pero no debes darte por vencido porque no solo estás tratando con un animal, él te va entender y será capaz de hacer eso y muchas cosas más.
resultados, que utilizar el regaño como arma de aprendizaje; y cada vez que esté recibiendo las normas de conducta, trata de premiarlo y notarás que las cosas salen mejor.
Comienza por enseñarle que debe hacer sus necesidades en un lugar estratégico que hayas dispuesto para ello, no te preocupes si observas que no aprende y te está quitando el tiempo, porque no es así, porque quizás no parece que estuviera aprendiendo, pero sí lo está haciendo; solo hay que tener paciencia. Ya cuando el cachorro lo haya logrado es el momento de enseñarle a hacerlo fuera de casa y verás como aprende inmediatamente.
No olvides que la paciencia es primordial, ser constante en el entrenamiento es lo mejor, trata a tu perro con cariño y verás como empieza a aprender todo lo que le enseñas, siendo luego un ejemplo para las demás personas que tienen un can de compañero; suerte y solo trata que todo sea divertido, para él y para ti.