14 agosto 2012

Gatos, la importancia de castrarles

Los gatos como los seres humanos son animales territoriales, les gusta conocer nuevos territorios y aunque sean cazadores solitarios suelen unirse a otros gatos cuando llega la época de la reproducción, pelearán con los machos dominantes para poder montar a las hembras. Muchos de los dueños de los gatos se han sentido agobiados frente a la insistencia de sus mascotas al llegar la época del celo.

Este comportamiento se suele presentar a los 8 o 9 meses de edad aproximadamente si bien puede darse un poco antes o un poco después según la raza y costumbres de los gatos. Nuestras mascotas reclaman la necesidad de salir a la calle en busca de otros gatos o bien con insistentes maullidos o bien con pistas de orín por todas las esquinas.

El primer comportamiento suele ser más típico de la hembra mientras que el segundo lo es del macho. Ante esta situación muchos propietarios toman la decisión de dejarles salir a la calle pues desde luego es más económico que castrarles y se evitan los problemas derivados del celo. Pero ésta sin duda no es la decisión más acertada.

Cuando un gato sale a la calle por norma general peleará con otros felinos pues así funcionan socialmente. El gato deberá pelear con otros gatos para ejercer la dominación sobre ellos y poder montar a la hembra, pero cortejarla tampoco será fácil pues esta también se resistirá y es bastante probable que también deba pelear con ella antes de montarla.

Si nuestro gato sale a la calle debemos saber que como mínimo podemos arriesgarnos a que traiga pulgas, garrapatas y bacterias de todo tipo a nuestro hogar. Nos arriesgamos además a que nuestro amigos sea atropellado, salga gravemente herido de alguna pelea y un sin fin de crueldades más que puede sufrir. Si amamos a nuestra mascota de seguro esta no es la mejor opción para el ni para su salud y desde luego no es la decisión más acertada que podamos tomar como dueños. Lo ideal siempre es castrarles y así evitar que sufran en la época del celo, si bien aun tendrán ganas de salir no serán tan insistentes y en caso de que se nos escapen no pelearán con otros gatos por montar a las hembras pues habrán perdido todo el interés.