Nos encanta compartir tiempo con nuestra mascota, dar paseos con ella, hacer ejercicio e incluso hacer excursiones. Ir a la playa con nuestro can puede ser una experiencia magnífica, pero para que no haya incovenientes no deseados, debemos tener en cuenta algunas consideraciones antes de llevar a nuestra mascota con nosotros.
Es importante asegurarnos primero de que el lugar al que deseamos ir acepta mascotas en primer lugar. Si es así, entonces podemos preparar las cosas y emprender el día de playa. No debe faltar entre nuestras cosas una sombrilla. Debemos pensar que nuestro amigo no es igual que nosotros ni soporta el calor de la misma manera.
Un cacharro para darle agua fresca también es indispensable. Es recomensable llevarnos una nevera donde el agua pueda mantenerse fresca y llevar también una bolsita y papel para si nuestro amigo realiza alguna defecación durante el día poder recogerla. No debemos dejar que nuestro amigo ande sólo por el lugar si no estamos seguros de que pueda incomodar a otras personas.
Si lo bañamos, debemos tener mucho cuidado con sus orejas. Debemos evitar los juegos pesados, así como los chapuzones bruscos. Debemos permitir que el se bañe y nade a su ritmo para evitar asustarle o mojarle el interior de las orejas. Teniendo en cuenta estos sencillos consejos podemos disfrutar de un divertido día de playa con nuestro amigo.