Mascotas que quedan muy aprensivas en la presencia de extraños son difíciles de educar. Normalmente, estas mascotas son capaces de caminar entre una multitud de personas, así como ignorar la presencia de invitados a casa, pero basta con que una persona intente hacerle una caricia, para que el comportamiento del perro cambie drasticamente.
Este tipo de reacción es decurrente en animales que no tuvieron experiencias positivas en su etapa de sociabilización, entre las 3 semanas y 3 meses de edad, con personas que no son miembros de la familia. En esta fase, los animales están listos para explorar y conocer. Si en algunas de estas exploración, las personas no hayan sido muy amistosas o agradables, el perro tiende a generalizar esta sensación para todas las otras situaciones de su vida.
Las personas, sin quererlo, acaban empeorando la situación. Intentar acercarse al animal con prisas, sin pedir “permiso” para hacerlo puede complicar aún más el cuadro. Muchas veces, muchas personas se acercan a un cachorrito a la vez, agobiando el animal.
Muchos perros pueden retraerse, en cuanto otros soltarán un ladrido. Una vez que aprenda que al ladrar, las personas le dejan en paz, usará este método para alejar los extraños. Es así que se convierte un cachorrito inocente e inseguro en un perro que está siempre en defensiva.
Si le castigas, el perro esconderá el miedo de ti, pero no lo superará. El perro reprimirá su sentimiento hasta no poder más y es entonces que seguramente atacará.
Los perros no entienden los gestos “amistosos” de los humanos. Si el perro tiene miedo a extraños, por más que le digas que aquella u otra persona son amigas, el no dejará de sentir miedo. La confianza vendrá con el tiempo y debes respetar el espacio del animal.
Un buen truco es agacharse y mirar hacia otro lado, como si no dieras la mínima importancia a la presencia del animal. Deja que el mismo se acerque para olerte. Puedes también dejar caer algunas golosinas caninas cerca de ti, eso hará que los vínculos de amistad vayas progresando.
Es muy importante respetar el espacio del animal y no hacer nada que pueda forzar la situación o asustarlo. Haga movimientos suaves y gestos delicados.
Cuando notes señales de miedo en tu perro, aleja la persona que ha intentando acarícialo y llama la atención del perro para ti, haciendo que se olvide del extraño. Cambia su estado emocional, de asustado para feliz, con alguna recompensa o la realización de algunos trucos de adiestramiento.