12 julio 2013

Razas: El gato Somalí

Encontramos el origen de esta raza en Estados Unidos, Nueva Zelanda, Canadá y Australia en los años 50; hacía años que en todos estos países se trabajaba con abisinios y es muy probable que se usaran cruces de gatos Persas y Siameses para depurar la raza, ese mismo cruce de razas provocaría que apareciesen en algunas camadas gatitos con pelo largo.

El cuerpo de este felino es robusto, alargado y esbelto, con un leve arqueamiento de su dorso con el que da la impresión de estar siempre a punto de dar un salto; cola fuerte y larga en forma de plumero, patas medio largas, de osamenta delgada y finas, cabeza terminada en cuña con forma redonda, nariz medio larga, orejas grandes, anchas y puntiagudas.

Ojos redondeados por párpados oscuros, de color dorado o verde y almendrados, su temperamento es juguetón y extrovertido; necesita un árbol o juguetes donde poder ejercitarse. No es muy amante del frío y se adapta bien a espacios interiores, aunque por su instinto cazador necesita realizar alguna escapada al exterior; es muy inteligente y comprende y acepta fácilmente órdenes sencillas que le indiquen lo prohibido o lo permitido; esta raza de gato no requiere cuidados específicos, aunque por su pelo semilargo deberemos cepillarlo a menudo para evitar que se enrede.