12 julio 2013

Trucos para facilitar el acercamiento y amistad entre perros y gatos agresivos

Aunque sea normal el pensamiento que dice que perros y gatos son eternos enemigos, en algunos casos es posible que ambos animales consigan establecer fuertes vínculos de amistad. Para ello, es necesario establecer ciertos límites seguros y trabajar con ellos en las varias etapas que pueden pasar entre este acercamiento. La mayoría de los perros jóvenes prefieren jugar con otros animales en vez de atacarlos. Esta historia puede cambiar cuando el perro ya es adulto. Conozca, a continuación, algunos trucos para enseñar tu perro a convivir con gatos y viceversa:

Lo mejor es presentar el perro para el gato ya muy temprano, cuando aun son cachorros, si posible. De a los animales la oportunidad de conocer su presencia, permita al gato permanecer gradualmente próximo al perro, lo que le hará menos propenso a atacar.

Los animales castrados o esterilizados reducen casi totalmente su comportamiento agresivo, tanto en relación a gatos, como a otros animales, es una buena opción si quieres evitar atritos.

Pasea con tu perro frecuentemente y juegue con él, el máximo tiempo posible y lejos del gato, así estará con las energías agotadas al interactuar con el felino.

Esté presente en el ambiente donde los animales suelen estar juntos. Separa los animales, si necesario con vasos de agua, siempre que enseñaren señales de agresión y su voz de comando sea ignorada.

Mantenga áreas separadas en tu hogar para cada animal, si posible. Manténgales separados cuando no estás cerca y no puedas vigilarlos. Deja ropas y sabanas viejas de un animal con el otro para que vayan familiarizándose con los olores del otro.

Nunca intente separar físicamente una pelea entre tu perro y gato, ya que podrás ser accidentalmente arañado o mordido. Usa agua como dicho anteriormente.