25 agosto 2008

Perros vs. Gatos

Perros contra gatos, o más bien debería decirse dueños de perros contra dueños de gatos. Examinemos los argumentos de cada bando:

Para los amigos de los canes, el perro es fiel, mientras que el gato es traicionero, aunque para los amigos de los gatos esta cualidad de los felinos se llama independencia, y la fidelidad de los perros es una muestra de su servilismo.

El gato no acompaña al hombre sino que es un animal que comparte el espacio con él. En cambio, el perro sí es una verdadera mascota. El gato no quiere al amo sino que se acostumbra a él.

Para los amigos de los gatos, el perro es un animal extremadamente sucio, claro que, quién ha podido bañar alguna vez a un gato…

Para los amantes de los perros, es un animal cariñoso y demostrativo, mientras que el gato nunca da señales de afecto, por ejemplo nunca viene a hacerle fiesta al amo, en realidad, el gato sólo viene cuando te necesita, y la única manifestación de cariño de los gatos es su ronroneo, cosa que también hacen cuando están muy enfermos…

Un par de puntos a favor que tienen casi indiscutiblemente los gatos son: que la comida que hay que comprarles no es tan cara como la de los perros (y ni hablar si se trata de un perro de gran tamaño…), y que el gato no tiene olor, en cambio, el conocido “olor a perro” es bastante desagradable.

Sin duda, una de las contras de los perros son los muchos cuidados que requieren, pero gran cantidad de personas disfrutan de, por ejemplo, el paseo con sus perros, y no lo ven como una obligación.

Un hecho bastante evidente es que los dueños de los gatos son personas bastante más “complejas” que los dueños de los perros, y la relación que se establece entre gato y amo (si es que puede llamarse así al dueño de un gato) es muy peculiar.

En cambio, el perro es un gran compañero, un ser que da cariño todo el tiempo, es una alegría para la familia, y está dispuesto a dar la vida para defender a los suyos.

Más allá de estos argumentos a favor de uno y otro bando, y como sabe cualquiera que tenga ambas especies de mascota, eso de “llevarse como perro y gato” es más un mito popular que una realidad, ya que si se acostumbran desde cachorros ambas especies viven en perfectas armonía.

Y si los perros y los gatos pueden convivir en armonía, sus dueños también deberían poder hacerlo…

Via: www.universalpet.es