A pesar de lo que erróneamente se cree, las dietas altas en proteínas no causan enfermedad renal, siempre y cuando el perro esté sano. Cuando el animal digiere y metaboliza las proteínas, se liberan compuestos nitrogenados, cuyo excedente es liberado a través del sistema renal.
El rinón posee gran capacidad de filtrado de sustancias, por lo cual drenaría el exceso, siempre y cuando el animal no presente daño renal y se tenga en cuenta la importancia de aportar proteínas de alta calidad biológica.
Se debe de tener en cuenta que no se debe de exceder en proporcionar una alimentación, con gran concentración de proteínas a un perro con disfunción renal -aunque las proteínas poseean alta calidad-, ya que el riñón no puede eliminar todo el excedente y puede llegar a intoxicar otros tejidos; es por ello que lo más adecuado es ofrecer al perro una alimentación seca, preparada especialmente para perros con problemas renales.
A menos que no exista un problemas específico de riñón, se puede ofrecer una dieta rica en proteínas al perro, el ofrecer una dieta más o menos rica en proteinas, no asegura la salud de este órgano, aunque siempres es importante cuidar la dieta en el perro y ofrecer una alimentación balanceada.