Existen los soplos fisiológicos, como consecuencia de otras patologías como la fiebre o la ansiedad y los soplos orgánicos, que responden a alteraciones cardíacas o valvulares y representan una patologia cardíaca.
Entre las causas cardíacas que producen un soplo se hallan las cardiopatías congénitas -estenosis pulmonar y displasia valvular-o cardiopatías adquiridas -endocarditis bacteriana o insuficiencia mitral-.
No se presentan signos clínicos, lo que el animal puede presentar son las consecusancias del fallo cardíaco como tos, agitación, dificultad respiratoria o síncopes. Se puede realizar el diagnóstico mediante auscultación o técnicas complementarias como el electrocardiograma o ecografías, aunque el tratamiento dependerá de la patología cardíaca de base.