Lo más normal es salir con nuestro perro a la calle dando un paseo. Tan saludable para él como para ti. Todos los días hacemos algo de deporte con la escusa de sacar a nuestro amigo a dar una vuelta por el parque.
Pero… y si también tenemos gatos en casa… ¿Por qué no sacarlos con la correa y darles un paseo?
Por experiencia sé que los felinos son muy independientes y les gusta ir a su aire, pero habrá más de uno que no quiera despegarse de tí y puede que les guste dar un paseíto contigo.
Si tenemos paciencia y lo tratamos con cariño, seguro que nuestro gato responderá muy bien al paseo con un arnés. Y digo arnés pues el cuello de los gatos es más delicado que el de los perros y si sujetamos la correa por el collar del cuello, lo más probable es que podamos lastimarlo sin querer.
Eso sí, tendrás que olvidarte de paseos largos, hacer deporte por el parque como haces con el perro o juguetear con él tirándole la pelota para que vaya a buscarla.
Los gatos son animales tranquilos y sosegados, aparte de asustadizos. Por tanto, un consejo que te doy, es ir acostumbrándolos poco a poco al jaleo de la gente, los coches, otros animales y la correa.
Prueba e inténtalo primero por la casa, ponle la correa y dale vueltas por las habitaciones. Si ves que no la tolera y se pone muy nervioso sólo estando en casa, mejor será que nos olvidemos del resto.Como ya he dicho otras veces, cada animal es un mundo nuevo por descubrir.