Conocida como traqueobronquitis infecciosa o más comunmente tos de las perreras, empieza a hacer su aparición en las mascotas, llegado el invierno. No está causada por un único virus, sino por varios o unidos con bacterias, sieno los dos gérmenes más frecuentes, el virus de la parainfluenza y la Bordetella Bronchiseptica y que atacan fundamentalmente a la traquea.Es una enfemedad muy contagiosa, que muestra los signos clínicos, unos cuatro días después del contagio y lo hace por inhalación de los microorganismos.
En general, los perros comen bien y se muestran contentos, pero muestran una tos muy aparatosa, debido a la traqueitis, gravándose por las noches y que cursa con expectoración; también presenta secreción ocular y nasal.
Si dejan de comer, se muestran tristes y presentan fiebre, es necesario acudir al veterinario, ya que podría complicarse con una neumonía; de lo contrario, cura sola y suele durar unas dos semanas, aunque a veces es necesario dar antibióticos, hecho que será valorado por el veterinario.
Existen razas con riesgo añadido; son las braquiocefálicas, como el Boxer, Shi Tzu, Bulldog Inglés o Bulldog Francés, ya que presentan mayor riesgo de contagio y aquellos perros que presenten problemas respiratorios y cardíacos, animales con el sistema inmunitario debilitado o cachorros. Para prevenir esta enfermedad existen dos tipos de vacunas: una inyectable y otra que se aplica por vía intranasal.