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17 noviembre 2011

Comportamiento: Nuestro gato nos habla con su cola

¿Cuántas veces hemos pensado que nos gustaría que nuestro gato hablase? Sería muy interesante y divertido saber que piensan y como se encuentran en cada momento. Pero aunque no sean capaces de hablar y verbalizar sus emociones y estados de ánimo si que tienen un rico lenguaje corporal que puede ayudarnos a entenderlos mejor. Hoy vamos a centrarnos en su cola:

* Si la cola esta curvada ligeramente hacia abajo y luego curvada en la punta; significa que nuestro gato está relajado y cómodo.
* Si la cola esta ligeramente elevada y suavemente curvada es que el gato a visto algo que a despertado su interés.
* Si la cola esta hacia arriba pero su punta esta doblada hacia adelante o hacia atrás significa gato está muy interesado en algo y que ese algo es agradable.
* Si la cola esta totalmente estirada hacia arriba (a esta postura yo le llamo el coche de choque- porque el mío suele salir a recibirme corriendo así cuando llego a casa) el gato está ofreciendo un saludo amistoso y alegre.
* Si en la posición anterior el gato balancea la cola, está mostrándonos su cariño.
* Si la cola esta inmóvil, pero de vez en cuando su punta se mueve podemos saber que nuestro gato está ligeramente irritado o pensativo. ¡A saber que estará tramando!
* Si el gato mueve la punta de la cola rápidamente es que está enfadado.
* Y si en vez de la punta de la cola, mueve todo el rabo, es que el cabreo es ya considerable.
* Si la cola esta estirada hacia arriba y erizada, es muy probable que el gato esta tratando de intimidarnos y de mostrarnos su enojo.
* Si el gato tiene la cola erizada y la arquea en lugar de mantenerla estirada como en el caso anterior, esta preparado para atacar a la mínima provocación.
* Si por el contrario nuestro gato tiene la cola erizada pero hacia abajo, indica que está asustado.
* Si la cola esta totalmente hacia abajo, y especialmente si está entre las patas, el gato esta mostrando su derrota o siendo sumiso.

Y todo esto pueden decirnos solamente con su cola. En otro post, profundizaremos en el rico lenguaje corporal de nuestros pequeños amigos felinos.

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