03 agosto 2012

Perros: Miedo al veterinario

Muchos perros tienen miedo al veterinario y sufren cada vez que tienen que ir, aunque sea para administrarles una simple vacuna.

La primera vez que llevemos a nuestro perro al veterinario irá sin miedo, pero cuando haya ido un par de veces más, seguramente las posteriores se convertirán en un suplicio para él.

Cada vez que tu perro se dé cuenta de que lo llevas al veterinario seguramente tirará de la correo en sentido contrario a la consulta, se parará y no querrá avanzar, si vais en coche seguramente no querrá bajar, se pondrá nervioso, etc.

Si nuestro perro es pequeño no habrá más remedio que cogerlo en brazos pero si es un perro grande no lo tendremos tan fácil, por ello tendremos que hacerlo de otra forma, siguiendo unas sencillas recomendaciones, y evitar que nuestra mascota lo pase mal:

La primera visita al veterinario es muy importante ya que el recuerdo que le quede al perro lo va a acompañar en las siguientes veces. Debemos intentar que nuestro perro esté tranquilo y mostrar una actitud positiva y confiada ante él. La primera vez es recomendable que sea para algo simple como un chequeo.

Para las siguientes visitas, como por ejemplo vacunaciones o pruebas, es mejor salir con tiempo, de esta forma, si nuestro perro no colabora o le cuesta avanzar tendremos tiempo suficiente para relajarnos y transmitirle tranquilidad al animal. Aunque estemos preocupados es muy importante que nos intentemos relajar porque él lo va a percibir y todavía se pondrá más nervioso.

Una buena idea antes de una visita al veterinario es dar un buen paseo o jugar un rato con él para que queme energía y baje su nivel de ansiedad cuando entremos a la consulta.

Si llevamos a nuestro perro en transportín tendrá siempre a su disposición su juguete preferido.