Aprender a cuidar un perro viejo

Tener un perro, independientemente de la edad que tenga, siempre es una responsabilidad y, como dueños, debemos proporcionarle todos los cuidados necesarios para su salud y bienestar.

No obstante, la vejez es una de las etapas más importantes y especiales para ofrecer a nuestra mascota la mejor calidad de vida que podamos durante sus años más complicados o difíciles.

A partir de los 7 años, un perro ya se considera mayor, y puede que empiecen a surir las primeras complicaciones o síntomas que requieran de una atención especial.

Uno de los síntomas habituales en los perros viejos es la pérdida de energía y vitalidad, junto con el descenso de las ganas de jugar y de hacer ejercicio, así como dificultad para levantarse cuando están tumbados.

Los perros viejos pueden sufrir algunas enfermedades propias de la edad, como por ejemplo: artritis, obesidad, sordera, ceguera, enfermedades renales, incontinencias, cáncer, enfermedades cardíacas, tumores, entre otras.

Los perros mayores requieren una atención especial y una paciencia mucho más desarrollada que en etapas anteriores. Como propietarios debemos entender que no solamente es divertido tener una mascota durante su juventud, sino que también se merece los mejores cuidados en la vejez como premio y agradecimiento por tantos años de amor y fidelidad.